Gastronomía: Cena al estilo italiano

Pocos pueden resistirse a la deliciosa gastronomía italiana, llena de sabor y aromas, donde la pasta

y el queso son protagonistas. En este blog te daremos un par de ideas para llevar a cabo un perfecto menú italiano para esa comida o cena especial.

Tal vez el secreto del éxito de la cocina italiana es que se basa en platos sencillos y de delicioso sabor. Tienes múltiples opciones para no complicarte demasiado y conseguir un menú al gusto de todos. Para llevar a cabo las distintas recetas, puedes elegir la pasta fresca o bien deshidratada y recuerda siempre que es muy importante un punto justo de cocción. Sigue las instrucciones en cuanto a tiempos al fuego necesarios para conseguir una pasta fresca y al dente (no pasada y pegajosa).

Entrada: Tabla de quesos y Ensalada Caprese

° Tabla de Quesos

Una tabla de quesos ideal debe tener por lo menos un queso por familia:

- Quesos envejecidos (Gouda, suizos, Cheddar, etc.)

- Quesos de pasta blanda (Brie, Camembert, etc)

- Quesos duros (Gruyère, Jarlesberg, Monterey Jack, Provolone, etc)

- Quesos azules (Gorgonzola, Stilton, etc)

Para el acompañamiento de la tabla no debe faltar un buen vino para hacer de la de gustación una mejor experiencia. Ademas tener galletas o trozos de pan para los quesos no está demás.

° Ensalada Caprese

Esta ensalada es ideal para una entrada, es exquisita, realza sabores y ademas es de muy sencilla preparación.

Ingredientes

- Albahaca

- 1 tomate grande

- Queso mozzarella fresco

- Sal

- Aceite de oliva virgen extra

- Orégano

Preparación

Ponemos una base de albahaca.
Cortamos en rodajas el tomate y la mozzarella (la dejamos escurrir anteriormente). Y colocamos alternando capas sobre la albahaca.
Simplemente queda aliñar con aceite de oliva, sal y un poco de orégano.

Plato de fondo: Lasagna

La lasaña es un tipo de pasta que se sirve en láminas, además de denominarse así también a un plato que tiene pasta en láminas intercaladas con carne y bechamel llamado lasaña al horno.

Ingredientes

500 gramos de carne molida de res
500 gramos de salchicha italiana
125 mililitros de agua tibia
150 gramos de aceitunas negras
1 pizca de albahaca seca
2 cucharaditas de ajo en polvo
1 cucharada de orégano seco
1 1/2 cucharaditas de salvia
2 cucharaditas de pimienta negra molida
2 cucharaditas de ajo fresco finamente picado
1 cucharada de cebolla deshidratada en trozo
800 gramos de salsa de tomate italiana
500 gramos de pasta lasagna
250 gramos de requesón
450 gramos de queso mozzarella rallado

Preparación

Sella la carne molida y la salchicha italiana en un sartén grande a fuego medio alto. Escurre el exceso de grasa. Agrega el agua y las aceitunas negras y sazona con albahaca, ajo en polvo, orégano, salvia, pimienta, ajo fresco y cebolla deshidratada. Cocina a fuego lento durante 15 minutos, moviendo constantemente. Incorpora la salsa italiana y retira del fuego.
Precalienta el horno a 190 °C.
Coloca una capa de carne con salsa en el fondo de un refractario o molde para hornear de 23 x 33 cm. Cubre con una capa de lasaña. Unta una capa delgada de requesón sobre la pasta y espolvorea un poco de queso mozzarella. Cubre con otra capa de salsa y repite el proceso hasta terminar con una capa de carne y salsa. Reserva alrededor de 1/2 taza de queso mozzarella para su uso posterior.
Hornea durante aproximadamente 45 minutos, pero checa después de 30 minutos ya que el tiempo de cocción puede variar dependiendo de qué tan gruesa esté la pasta. Sabrás que está lista cuando fácilmente puedas insertar un cuchillo dentro de la misma. Espolvorea el queso mozzarella reservado y hornea durante 10 minutos más para lograr un gratinado perfecto.

Postre: Tiramisu

El tiramisú es un postre frío, en el proceso de elaboración no necesitamos usar el horno. Tiene una elaboración fácil y rápida para un resultado espectacular. Es un postre frío que se degusta con cuchara, se monta en capas de bizcocho, junto a una crema elaborada con huevos, azúcar y el queso mascarpone, ideal por su cremosidad y su sabor dulzón. La mezcla de contrastes en cada capa, con el bizcocho bañado en café y licor, junto a la crema mascarpone. Hacen que este postre sea una verdadera delicia para nuestro paladar. Es sin lugar a dudas uno de los postres mas elaborados en cualquier parte del mundo.

Ingredientes

2 claras de huevo
4 yemas
100 gr. de azúcar
400 gr. de queso mascarpone
200 gr. de bizcochos de soletilla
175 ml. café
200 gr. de chocolate negro
cacao en polvo para espolvorear

Preparación

1. Prepararemos una cafetera con el café que más nos guste, si no disponemos de cafetera porque últimamente solo usamos las cafeteras con cápsulas de infinidad de sabores según nuestros gustos, con unos 250 ml del café que más tomamos será suficiente. Dejaremos enfriar y reservaremos hasta su uso.

2. En un bol montaremos las claras a punto de nieve con la batidora de varillas eléctrica, apartaremos hasta su uso.

3. En otro bol batiremos las yemas con el azúcar, hasta conseguir una mezcla espumosa con los dos ingredientes, añadir el queso mascarpone poco a poco y seguir batiendo, añadiremos las claras montadas a punto de nieve y mezclaremos bien todos los ingredientes. Está será nuestro crema de mascarpone para el tiramisú.

4. En un molde rectangular (normalmente empleamos un molde rectangular para elaborar el tiramisú, podemos utilizarlo de otro tipo) iremos montando las capas con el bizcocho de soletilla y los empaparemos bien con el café que hemos preparado y echaremos un poco de brandy, amaretto o un licor que nos guste.

5. Cubriremos la capa de bizcochos de soletilla con la crema mascarpone que hemos elaborado en el paso 3. Espolvorear con chocolate negro rallado.

6. Volveremos a montar otra capa de bizcochos de soletilla, bañaremos con café y brandy, echaremos de nuevo la crema de queso mascarpone por toda la superficie del molde que tenemos y terminamos la capa espolvoreando con el cacao en polvo por toda la superficie del tiramisú.

7. Podemos repetir la acción del paso 6, si nuestro molde es muy alto. Dejaremos reposar en la nevera mínimo tres horas. Yo recomiendo dejar el tiramisú en el frigorífico de un día para otro ya que la crema adquiere más consistencia y esta mucho más estable y cuajado.

Para tomar: Vino

En el caso de la comida italiana, existe una serie de vinos chilenos que son ideales para el maridaje con pastas, debido a su cuerpo, sabor y textura, entre otras características. A continuación, encontrarás algunas recomendaciones:

Castillo de Molina Chardonnay – Viña San Pedro

Un vino chileno que destaca por sus aromas a pomelo y durazno, con toques de avellana. Es cremoso, fresco y equilibrado, con un buen nivel de acidez. Cualquier pasta acompañada de salsa en base a crema, o rellena con carne y pescado, combinará a la perfección con este Chardonnay.

Casillero del Diablo Shiraz Rosé – Concha y Toro

Con un atrayente aroma a frutos rojos, color púrpura, notable acidez y marcado sabor a frutilla, este vino chileno se impone sobre el resto. Para el maridaje, es preferible combinarlo con pastas sin relleno o salsas muy condimentadas, de preferencia naturales, como la de tomate o atún.

Gran Reserva Serie Riberas Carmenere – Concha y Toro

Un tinto llamativo y robusto, con notas de ciruela, frutos silvestres, mora y un toque de chocolate. Tiene un sabor complejo, pero agradable al paladar. Se recomienda para pastas rellenas (con verduras o carne), como Tortellonis, Canelones, Raviolis o Sorrentinos.

Selección de Familia Gran Reserva Merlot – Luis Felipe Edwards

Este vino chileno es frutoso y posee aroma a cereza, ciruela, pimienta blanca y mora. Es de acidez media, pero termina en un final dulce. El maridaje debe ser junto a pastas como el Fettuccine, con salsas de tomate, picantes o tipo Alfredo.

TH Leyda Pinot Noir – Undurraga

Se trata de un vino chileno que resulta ser muy versátil. De cuerpo liviano, generará el maridaje perfecto con pastas rellenas de atún y salsa en base a tomates o champiñones.